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A raíz de unos cursos que he empezado a dar sobre cómo montar tu negocio online, he creído que podría ser interesante para el alumnado escribir unos artículos al respecto explicando algunos de los conceptos básicos. Y a la vez los dejo aquí en abierto para cualquier visitante que puedan interesarle. En este caso veremos qué son el dominio y el hosting de una página web.
🚨 Alerta a expertos y puristas: Esta publicación está enfocada de un modo ilustrativo para gente que se está adentrando en cómo funciona una página web. Por lo tanto no entraremos en tecnicismos y es posible que algo de lo escrito no se corresponda al 100% con la realidad. No se me enfade nadie… haya paz.
Si estamos pensando en montar una web hay algo que vamos a necesitar seguro, y eso son un dominio y un hosting para nuestro proyecto. Veamos qué son el dominio y el hosting de una página web de un modo fácil e ilustrativo.
¿Qué es el dominio de una web?
Empezaremos por algo sencillo, un dominio web sería por ejemplo google.es o en nuestro caso informaticatorredembarra.com. Si os fijáis consta de dos partes: por un lado tenemos el nombre del dominio google o informaticatorredembarra y por el otro la extensión del dominio, que en este ejemplo serían .es y .com. Hoy en día extensiones de dominio hay decenas, incluso centenares diría yo. Pero de ese tema ya hablaremos más adelante.
Si hiciésemos el símil donde nuestra web o tienda online fuese un local físico, el dominio sería la dirección postal donde se encuentra nuestro local. De modo que si alguien quisiera venir a visitarnos, nos encontrarían gracias a esa dirección.
Pues lo mismo ocurre con un dominio web, cuando escribes google.es en tu navegador, ese dominio es el que se encargará de indicarle qué página es la que debe ir a buscar y mostrártela.
El dominio en realidad está apuntando a una IP pública, que suele ser algo tipo 35.214.232.250. Y esa IP a su vez apuntará a un servidor web. ¿Verdad que difícilmente recordaríamos una única IP para acceder a la web que nos interesa? ¡Imaginaos varias! Por suerte gracias a los DNS no debemos porque recordarlas y tenemos los dominios web para que todo sea más fácil.
Sí, soy consciente que he metido un par de conceptos como IP pública y DNS en el párrafo anterior, pero por ahora no profundizaremos, lo dejamos para el final, por ahora simplemente agradece que existan y nos faciliten las búsquedas por internet 🙂
¿Qué es el hosting de una web?
Bien, ahora que ya conocemos algo sobre el dominio de una web y que si lo ponemos en el navegador este nos llevará hasta la página que queremos visitar, veamos el siguiente paso, donde está almacenada.
El hosting de una página web es un espacio de un disco duro que alquilamos en un servidor web y donde almacenaremos todos los archivos y correos que forman nuestra web. Simplificándolo bastante, imaginaos un ordenador con mucho espacio para alquilar y accesible desde internet para que cualquiera con una conexión pueda llegar hasta la web que se encuentra allí dentro.
Si continuamos con nuestro ejemplo de antes donde nuestra web es un local físico, el hosting sería el equivalente al terreno donde ubicaremos nuestro local. Y el servidor web sería la población -donde hay muchos otros locales-, ya que no olvidemos que en la mayoría de las ocasiones solo estaremos ocupando un espacio especifico de ese disco duro del servidor. El resto del espacio lo están utilizando otros negocios.
Tipos de hosting
Hay muchos tipos de hosting, pero vamos a limitarnos a separarlos en dos grupos: compartidos y privados. En resumen en el compartido estaremos compartiendo los recursos con el resto de gente mientras que en el privado los tendremos todos para nosotros. Veamos un ejemplo.
Sigamos con los negocios en centros comerciales, pero esta vez nos pasamos al formato vertical. Imaginemos un edificio de 8 plantas como en muchas ocasiones tiene El Corte Inglés, donde dentro tienen espacios para muchas tiendas.
Hosting compartido: En este caso tenemos el edificio entero como el servidor web. Cada una de las plantas sería un hosting compartido y cada una de las distintas tiendas que hay por planta estaría ocupando un espacio de ese hosting compartido. Comparten los recursos, como puede ser el propio espacio físico, el aire acondicionado o la luz.
Hosting privado: Seguimos con el edificio entero como el servidor web en esta ocasión dispondremos de toda la planta para un único negocio. Aquí tendrá todos los recursos de la planta para su negocio y podrá explotarlos mucho mejor.
Empresa de hosting recomendada
Solo recomiendo empresas con las que he trabajado, y puedo asegurar que tanto Raiola Network como Siteground son hostings que puedo recomendar tranquilamente si lo que estás buscando en un hosting de calidad con soporte en español, horario de atención 24×7, especializados en WordPress y un alto rendimiento.
Bola extra: ¿Recordáis que antes pasamos por encima de las IP y las DNS? Ahora es su turno
Sigamos con nuestros símiles, si sabemos que un dominio es el equivalente a una dirección postal, ¿de qué manera podemos llegar a una ubicación física? Una manera muy fácil es usar un GPS. Pues bien, al igual que difícilmente alguien sería incapaz de recordar unas coordenadas tipo 41.3826939, 1.3292705, 19.05z, lo mismo ocurre con la ubicación real de una web. Por eso usamos los dominios, que a su vez apuntan a una IP que nos llevará a un servidor web, en el que pueden haber muchísimas webs.
¿Y quién se encarga de decirle a nuestro navegador que cuando escribo google.es debe llevarme a la IP 216.58.209.67 y una vez allí apuntar a una ubicación especifica del servidor? Ese trabajo corre a cargo de las DNS, que para poner un ejemplo gráfico diremos que son nuestros sherpas, son las encargadas de traducir lo que introducimos con un lenguaje que podemos comprender a otro más complicado para los humanos y llevarnos hasta nuestro destino.
¡Venga, pongamos un ejemplo con todo!
Imaginemos un polígono o centro comercial muy grande donde tenemos una amplía variedad de calles y negocios.
Las calles que nos permiten llegar a los distintos lugares serían internet. Para encontrar un local en concreto, deberemos saber exactamente dónde está y buscaremos su dirección, que sería el dominio. Una vez lleguemos allí, ese terreno sobre el que está la tienda que buscamos es el hosting, Y el edificio en sí, sería la web que buscábamos.
Y las DNS, me las he olvidado en el ejemplo? Nah, en este caso podrían ser cualquier empleado del centro que cuando le preguntemos por un negocio en concreto nos de las indicaciones necesarias para llegar hasta la puerta.
Al final me he alargado más de lo que tenía pensado. Pero creo que en un mismo artículo hemos tocado varios conceptos que pueden ayudar a comprender mejor cómo funciona la navegación por internet, explicando algunos palabros y el funcionamiento de algunos de estos.
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